

Mar del Plata dejó de ser solo un destino de veraneo para convertirse en una plaza inmobiliaria activa los 12 meses del año. En los últimos meses se multiplicaron los desarrollos de alta gama, desde torres con vista plena al mar hasta barrios cerrados en la zona sur, impulsados por compradores que buscan combinar calidad de vida con inversión segura.
Uno de los íconos de esta nueva etapa es el complejo Maral Explanada, diseñado por el prestigioso arquitecto César Pelli. Allí, los departamentos parten en U$S 239.000 para las unidades de dos ambientes, desde U$S 409.000 para los tres ambientes y superan el millón de dólares en los de cuatro. En paralelo, los loteos privados cerca de avenida Jorge Newbery avanzan con propuestas que incluyen servicios deportivos, áreas verdes y frentes comerciales.
El precio promedio del metro cuadrado en la ciudad se ubica actualmente en U$S 1.894, con un incremento del 4,9 % en lo que va del año. Aun así, sigue por debajo de los valores de la Ciudad de Buenos Aires, lo que atrae tanto a compradores finales como a inversores. En el mercado de usados, un departamento chico en zonas como La Perla o Güemes puede conseguirse desde U$S 45.000, mientras que en alquiler un dos ambientes ronda los $650.000 mensuales.
Las inmobiliarias locales coinciden en que el interés ya no se concentra solo en el centro tradicional: la expansión también se extiende hacia los barrios periféricos del norte y sur, donde los terrenos en preventa funcionan como reserva de valor. El cambio de perfil urbano parece definitivo: Mar del Plata apuesta a dejar atrás la estacionalidad para consolidarse como ciudad residencial de alto nivel.