Un proceso poco común se da en Argentina a partir del pedido de la conductora televisiva Natalia Denegri para que Google y Youtube deje de asociar su imagen con una de las épocas más nefastas y condenables de la TV nacional, donde la cosificación de las mujeres y las historias ficticias se volvieron moneda corriente en el país.

Ahora, con su vida totalmente alejada de aquellas épocas, la conductora y productora vive en Miami y busca limpiar una etapa de su vida que poco tiene que ver con su actualidad.

Para ello, comenzó con una demanda ante Youtube y Google para que dejen de asociar su imagen a esa época de su vida que ella misma se encargó de explicar, dejó atrás. “Me niego a que Google le diga al mundo que yo soy esos videos porque yo no soy eso: ese es el personaje que la corrupción de los noventa quiso hacer de mi”, explicó la protagonista en una rueda de prensa.

Que es el “Derecho al Olvido”

La figura de Derecho al Olvido hace referencia a la facultad que tiene una persona de solicitar a las empresas o a los motores de búsqueda que eliminen o bloqueen un dato personal suyo por considerar que afecta algunos de sus derechos. Un concepto que la Unión Europea ya aplica, al punto de que el mismo buscador tiene un formulario para solicitar la desindexación de determinada información personal, que también tuvo fallos en Chile y Perú, pero que en Argentina aún no rige.

Bajo esa figura, Denegri está intentando desde hace tiempo que Google quite de su fórmula de búsqueda su nombre vinculado a los extractos audiovisuales de los programas en los que se la ve peleando con otras mujeres, porque —según argumenta— se trató de hechos contrarios a su voluntad cuando era menor de edad, en el marco de una causa por la que fue sobreseída por falta de mérito. Un pedido que genera controversia ante la posibilidad de que su aplicación limite otros derechos, como el de la libertad de expresión y el acceso a la información.

El Caso Coppola, transformado en un show televisivo

La detención del ex representante de Diego Maradona por tenencia de drogas hizo que la mediatización del mismo se transforme en un bizarro espectáculo televisado a toda hora en TV y con diferentes actores.

Natalia Denegri saltó a la fama a mediados de los noventa, cuando el “Caso Coppola” la puso en el centro de la escena mediática. Por aquel entonces, la joven que apenas cargaba con sus 19 años a cuestas protagonizó horas y horas televisivas que mantuvieron entretenida a una audiencia que consumió el caso como si se tratara de una auténtica telenovela.

Claro que aquellas peleas televisadas que generaban docenas de puntos de rating en diversos programas (desde Mauro Viale hasta Chiche Gelblung o Lucho Avilés) no contó con el aval voluntario de Denegri, que afirma que fue “usada” bajo amenaza por los productores televisivos, el juez de la causa y los policías involucrados.

Hoy, 26 años después, intenta ponerle punto final a una etapa de la que no reniega pero no quiere que se transforme en su carta de presentación teniendo en cuenta el abrupto cambio que tuvo su figura en base a una carrera repleta de dedicación y trabajo.