Un hecho inusual sacude el panorama político en Japón: el partido Camino al Renacimiento anunció que su nuevo líder será una inteligencia artificial. La fuerza política fue creada en enero de 2025 por Shinji Ishimaru, exalcalde de Akitakata, una ciudad de unos 26.000 habitantes en el oeste del país.
El cambio de rumbo se produjo luego de que Koki Okumura, doctorando en IA, ganara las elecciones internas del partido y decidiera cederle el cargo a la máquina. Según explicó, el objetivo es que la inteligencia artificial asuma los procesos de toma de decisiones con mayor precisión que los humanos y, al mismo tiempo, incorpore voces que suelen ser ignoradas en la política tradicional.
A pesar de su flamante designación, la ley electoral japonesa establece que los candidatos deben ser ciudadanos, por lo que la IA no podrá presentarse a elecciones ni ocupar cargos públicos. Para representarla, se eligió un avatar con forma de pingüino, en sintonía con la preferencia cultural japonesa por los animales.
El fenómeno no es aislado: en Albania, el gobierno también presentó recientemente a una ministra digital basada en inteligencia artificial, con el propósito de garantizar transparencia e imparcialidad en los procesos de contratación pública.